La Reserva Federal de Estados Unidos parecen dispuestas terminar el ciclo alcista sobre las tasas de interés, pero se enfrentan el reto inminente de cuándo y cómo girar hacia los recortes de tasas que los inversores y políticos pueden exigir antes de que el ente monetario esté preparado.
Un indicador sobre la inflación subyacente que se sigue de cerca se mantiene en 3,5 por ciento en su cifra interanual, superando el objetivo del 2 por ciento de la Reserva Federal, que sigue alerta por un posible resurgimiento de los precios. La retórica de los dirigentes de la Reserva Federal apunta a una meseta prolongada o incluso otro incremento de tasas.
El tono podría mantener abiertas las opciones en un momento de incertidumbre, a pesar que las perspectivas hicieron que los responsables de la Reserva Federal confíen en la tasa actual del 5,25% al 5,5% para restar fuerza a la economía y reencauzar la inflación.
El primer debate tendrá lugar en la última reunión del 2023 de la Reserva Federal, entre el 12 y 13 de diciembre, donde se decidirá qué hacer y hacia dónde se dirigirán las tasas durante el año 2024.
Probablemente los dirigentes monetarios mantendrán las tasas estables por tercera reunión consecutiva y harán un balance sobre los datos que se movieron en gran medida con un aterrizaje suave de la economía.
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