En Brasil la economía se expandió más de lo proyectado, en un momento en que Jair Bolsonaro quiere impulsar la demanda con recortes de impuestos y ayudas más grandes a la población de cara a las elecciones de octubre.
El índice de actividad económica del banco central creció 1,17 por ciento en julio, superando todas las estimaciones de los expertos del mercado, que proyectaba una cifra cercana al 0,50%.
La economía más importante de América Latina se fortaleció a pesar de las alzas de tasas que elevaron los costos de endeudamiento en 13,75 por ciento. Gran parte de la mejora de debe al paquete gubernamental que incluye recortes de impuestos sobre los combustibles y servicios públicos en el mes de julio y mayores ayudas a sectores de menores desde agosto.
La economía es el principal punto de mira de los brasileños para la primera vuelta de las elecciones presidenciales que sucederán el próximo 2 de octubre. Mientras la inflación volvió a retroceder a un solo dígito, el banco central advirtió que los esfuerzos por controlar los precios no han terminado y que esperan una caída más pronunciada.
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